La Alfalfa

La alfalfa

Tradicionalmente la alfalfa se asocia con la alimentación del ganado y de animales de corral, pero sobre el ser humano obra interesantes acciones curativas y preventivas de enfermedades del sistema circulatorio.

Desde hace algunos años las semillas de alfalfa germinadas se venden en supermercados o en los mercados locales porque ellas tienen un alto contenido de sustancias que mantienen a raya al colesterol malo y dan mucha vitalidad.

Nombre científico: Medicago Sativa

Nombre común: Alfalfa

Descripción: Perteneciente a la familia de las leguminosas es una planta perenne (que no muere después de florecer y fructificar), con tallos delgados y erguidos cuyas hojas tienen cualidades nutricionales y medicinales. Sus flores son azules o moradas y su fruto es pequeño. Su cultivo es importante porque alimenta al ganado y animales como cuyes, conejos, etc. Favorece que el terreno se llene de nitrógeno y, por lo tanto, lo nutre.

Propiedades:
Depurativa y desintoxicante
Fuente de clorofila: energía
Eleva los niveles de hemoglobina en la sangre.mejora la digestión
Fuente de hormonas naturales
Mantiene el cuerpo joven y vital
Reconstituye

Partes empleada:

Hojas y germinados

Infusiones Caseras:
Consiste en verter agua recién hervida sobre las partes más suaves como hojas o flores.se deja reposar, tapando el recipiente para que los vapores se concentren, entre 5 a 10 minutos para extraer los principios activos, que son los que tienen las propiedades medicinales.

Por lo general se emplea una cucharadita de la planta seca en el interior de una taza, más o menos unos dos a tres gramos. 2-3 gr. Muy importante: cuando la hierba es fresca se debe duplicar la cantidad.

Usos terapéuticos tradicionales:
Gran energizante natural: mejora el desgano y la apatía
Ideal para el tratamiento de la anemia
Reduce el mal aliento
Deodorizante de los humores del cuerpo por su acción depurativa
Reduce la oxidación y el envejecimiento del organismo
Alimento altamente nutritivo por su concentración de  vitaminas
Evita la indigestión.

Modo de empleo:

- Extracto de las hojas y el tallo: recomendado diariamente por las mañanas (medio vaso), puro o mezclado con hojas de menta

- Harinas para diluir en jugos o infusiones o prepararlas como puré o papillas.

- Germinadas: en ensaladas